El Consejo Marítimo Internacional y del Báltico, prevé que el volumen mundial de graneles crezca entre un 1,5% y un 2,5% en 2023 y entre un 1% y un 2% en 2024, impulsado por las sanciones al carbón ruso y el aumento de los envíos de mineral de hierro y grano desde Brasil.
Cabe destacar que la economía china sufre una crisis inmobiliaria, un elevado desempleo juvenil, deflación y bajo consumo, unido a la debilidad de las exportaciones. Por ello, el Gobierno ha anunciado medidas de apoyo, pero no está claro si será suficiente para frenar la desaceleración económica.
En un escenario en el que estos estímulos no surtan efecto, la demanda de graneles sólidos crecería un 0,5% menos que en el escenario base planteado para 2023 y un 1% menos en 2024. Podría darse un escenario más positivo si China aumentara sustancialmente sus estímulos, pero parece improbable.
Se estima que los envíos mundiales de mineral de hierro crecerán entre un 2,5% y un 3,5% en 2023 y entre un 1% y un 2% en 2024. Cabe apuntar que este año, la demanda de importación de mineral de hierro en China ha superado a la producción de acero.
En concreto, en lo que va de año, la producción de acero ha aumentado un 3,5% en China, impulsada por el incremento de las exportaciones de acero y la acumulación de existencias. En cuanto a la producción mundial de acero, excluida China, cayó un 3,3% interanual entre enero y julio.
Por otro lado, se estima que los envíos de carbón crecerán entre un 4% y un 5% en 2023 y caerán entre un 1% y un 3% en 2024. Pasando a los cereales, los envíos caerán entre un 1,5% y un 2,5% en 2023 y se recuperarán entre un 3% y un 4% en 2024.
Flota
Se espera que la flota de graneleros crezca un 2,8% en 2023 y un 2,1% en 2024. Sin embargo, la oferta podría crecer entre un 1 y un 2% en 2023 y 2024 debido a la menor velocidad de navegación. En concreto, se espera que las entregas alcancen 34,4 millones de toneladas de peso muerto en 2023 y 32,3 millones en 2024, ligeramente por encima de los niveles de 2022.
Desde principios de año, se han reciclado más de 3,1 millones de toneladas de peso muerto, lo que supone un aumento del 47,5%, si bien se espera que alcance los 6,1 millones en 2023 y los 7,5 millones en 2024. Lo más probable es que siga limitándose a los buques más antiguos que han perdido competitividad debido a la normativa medioambiental.
Asimismo, debido a la menor velocidad de navegación, se estima que la productividad de la flota disminuirá entre un 1% y un 2% en 2023 y entre un 0,5% y un 1,5% en 2024. En su caso, la congestión se mantendrá cercana a la media de 2022.
En lo que va de 2023, ha disminuido marginalmente, pero los bajos niveles de agua en el Canal de Panamá y la temporada de tifones en el Pacífico podrían aumentarla ligeramente.
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