El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se reunirá con el jefe de la Asociación de Municipalidades del país (AME), Patricio Maldonado, para tratar las deudas que el Ejecutivo central mantiene con los gobiernos locales.
Según publica Prensa Latina, la Secretaría de Comunicación de la presidencia confirmó que la reunión tendrá lugar en el Palacio de Carondelet. La AME advirtió recientemente que 221 municipios atraviesan una situación financiera crítica, debido a que el Gobierno adeuda cerca de US$ 900 millones de dólares. Por tanto, exigen a Noboa un plan de pago y medidas de apoyo para cumplir con sus obligaciones básicas. La semana pasada en una entrevista con el programa radial A Primera Hora, Maldonado explicó que la deuda comprende tanto fondos que regularmente el Gobierno debe realizar a las administraciones locales, como obligaciones específicas establecidas en leyes.
“Hay municipios que deben ya tres y hasta cuatro meses de sueldos”, lamentó el funcionario y señaló que sin los recursos suficientes no pueden cumplir misiones esenciales como proveer de agua potable, alcantarillado, recolección de desechos sólidos, atención de salud y seguridad.
Los alcaldes reconocen que la crisis financiera es heredada de gobiernos anteriores, pero demandan un esfuerzo del actual para estabilizar la situación y evitar graves efectos sociales.
Una crisis similar sufren las provincias, aunque la prefecta de Pichincha y presidenta del Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador (Congope), Paola Pabón, anunció que el Ejecutivo pagará parte de la deuda de 710 millones de dólares con las administraciones regionales.
Ecuador prevé cerrar el año 2023 con un déficit fiscal de casi seis mil millones de dólares, el equivalente al cinco por ciento del Producto Interno Bruto, y ahí se incluyen pagos pendientes a proveedores del Estado, a los gobiernos locales, a la seguridad social, y salarios.
Noboa y su ministro de Economía y Finanzas, Juan Carlos Vega, anunciaron que planean vender parte de las reservas internacionales de oro y recortar mil millones de dólares del gasto público en 2024 para enfrentar la crisis financiera.
A su vez, la administración central pretende fomentar el empleo y estimular el crecimiento con la Ley de Eficiencia Económica aprobada la semana anterior en la Asamblea Nacional (Parlamento), aunque expertos y sindicatos consideran la medida insuficiente para resolver las dificultades.