El gobierno ecuatoriano liderado por Guillermo Lasso, intentará alcanzar un nuevo acuerdo con el FMI para el próximo año. Buscando un nuevo financiamiento ante la caída de sus bonos.
Debido al paro nacional que hubo en el mes de junio ocurrió el desplome de bonos ecuatorianos y se registraron grandes pérdidas, por esa razón, futuros préstamos de países extranjeros estarían en tela de juicio.
La deuda de la región incrementó en 16.3% con un vencimiento en el 2040, a principios de año contaban con un 10%.
Luego de una reunión con Goldman y JPMorgan, Lasso asegura que “el país es políticamente estable y tiene sólidos fundamentos”, “Incluso en el ámbito político, este es un gobierno muy sólido” y “ha sido capaz de ganar batallas democráticamente”.
A finales de año Ecuador completaría un acuerdo con la FMI, restando el último desembolso de $700 millones de dólares del préstamo.
Por otro lado, Ecuador anunció una renegociación de la deuda con China, si se logra el trato, se ahorrarían $1.400 millones de dólares en pagos, además de ampliar la fecha de vencimiento.
Lasso comenta que “no tiene previsto recurrir a los bancos chinos para obtener deuda en 2023″.
Finalmente, las ofertas para la venta del Banco del Pacífico, banco comercial que pasó a manos del Estado, se deben de presentar la próxima semana. “Ecuador está bien posicionado para sortear una posible crisis de la economía mundial, ya que algunas exportaciones clave, como el camarón, registran demanda internacional récord”, añadió el presidente.
