La Federación Nacional de Transporte Público de Pasajeros de Ecuador (Fenacotip) convocó a un paro para los próximos días 16 y 17 de julio en rechazo a la eliminación de los subsidios a las gasolinas y ante la inseguridad en las vías del país, azotado por la escalada de la delincuencia.
El presidente del gremio, Abel Gómez, dijo en rueda de prensa en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste), una de las más inseguras, que se sumarán a la medida los chóferes del transporte interprovincial. «En honor a las vidas caídas, a las personas que han fallecido, sean usuarios o transportistas hay que apagar los motores. No se puede seguir trabajando en estas condiciones«, dijo Gómez.
Tal como publica Agencia Xinhua el dirigente agregó que el sector ha participado en mesas de diálogo con el Gobierno sobre seguridad, pero «esas mesas no están garantizando lo que nosotros pensábamos».
«Mientras estamos en las mesas de diálogo, nuestra gente está siendo perseguida, interceptada (…) usuarios asaltados y unidades interceptadas«, apuntó al rechazar los constantes asaltos a transportistas en las carreteras con saldo de víctimas.
La situación alcanza al transporte pesado en sus recorridos por rutas consideradas peligrosas o mientras entregan las cargas, lo que ha provocado pérdidas económicas.
Gómez agregó que la Fenacotip también se movilizará en rechazo a la reciente decisión del Gobierno de eliminar el subsidio a los combustibles, lo que derivó en un incremento del precio de las gasolinas el pasado 28 de junio. El galón de las gasolinas de bajo octanaje Extra y Ecopaís, las de mayor consumo, pasó a costar 2,72 dólares por el aumento de 0,26 centavos de dólar.
En lo que respecta al diésel, el combustible utilizado por los autobuses interprovinciales, el Gobierno decidió mantener el subsidio para evitar un aumento de tarifas de transporte a los usuarios. El precio del galón del diésel es de 1,80 dólares; sin embargo, los transportistas afirman que ha aumentado cada mes hasta llegar a 1,90 dólares.
Tras el fin de los subsidios a las gasolinas, el Gobierno ofreció una compensación económica a más de 84.000 transportistas propietarios de taxis, camionetas de uso comercial y tricimotos, no así al gremio del transporte interprovincial.
