En medio de una de las peores olas de violencia en su historia, los ecuatorianos votaron este domingo 15 de octubre por un nuevo presidente. El ganador fue el candidato del movimiento político Acción Democrática Nacional (ADN), Daniel Noboa, un empresario de 35 años que se convirtió en el principal líder del debate electoral y la primera vuelta.
Pero, ¿Quién es Daniel Noboa? El nuevo mandatario es el hijo mayor del empresario Álvaro Noboa Pontón y de la doctora en medicina Anabella Azín, quienes también habían incursionado en la escena política ecuatoriana, siendo su padre candidato presidencial cinco veces sin éxito y su madre legisladora y candidata a la vicepresidencia de la república del Ecuador.
Nacido en Guayaquil, estudió Administración de Negocios en la Escuela de Negocios Stern de la Universidad de Nueva York , asimismo, cuenta con tres maestrías: dos en administración y una en Comunicación Política y Gobernanza en The George Washington University.
A los 18 años fundó DNA Enternainment Group, una empresa dedicada a la organización de eventos, y también ocupó el puesto de director naviero en la Corporación Noboa. Posteriormente, se presentó a las elecciones generales del 2021, donde obtuvo un lugar por la provincia de Santa Elena, como parte del desaparecido movimiento Ecuatoriano Unido.
Su campaña presidencial estuvo enfocada en resaltar la atención a la seguridad ciudadana y la violencia política tras el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio y de otros políticos municipales, en medio de una lucha de poder entre las bandas criminales ecuatorianas vinculadas al negocio del narcotráfico.
Noboa también ha enfatizado en su mensaje político uno de los problemas que más preocupa a los votantes como es la falta de empleo, argumentando que sólo es posible proporcionar seguridad en el país si se estimula la creación de trabajo y se ofrecen alternativas que permitan disminuir las tasas de violencia.
Sus principales propuestas son:
- Estimular la creación de pequeñas y medianas empresas, con políticas que disminuyan la burocracia y faciliten el acceso a crédito.
- Incentivos tributarios para el sector productivo, que impulsen la sostenibilidad, y exenciones de impuestos para las empresas nuevas durante sus primeros años de actividad.
- Revisar y actualizar el salario mínimo.
- Militarizar los puertos y fronteras del país para frenar el tráfico de drogas.
- Plan de construcción y mantenimiento de infraestructura estatal de transporte, energía, agua y saneamiento.