Zebra Technologies aconseja a las empresas la incorporación de robots móviles autónomos a sus operativas como solución a un problema de mano de obra o de flujo de trabajo.
La digitalización de la compañías debe ser sólo el primer paso para mejorar el rendimiento, siendo la automatización de los flujos de trabajo a través de robots móviles autónomos (AMR por sus siglas en inglés), el objetivo a alcanzar.
Estos elementos pueden realizar en poco tiempo y de manera eficaz trabajos que pueden resultar física y mentalmente agotadores para las personas. Además, estas soluciones de robótica pueden implantarse en cuestión de horas y mecanizar distintos elementos de la cadena de producción en apenas unos días.
Es también interesante señalar los beneficios de estudiar los AMR, comparando el tiempo que se emplearía para ello con «el valor que pierden los trabajadores en actividades que harían mejor los robots«. Además, ahora los AMR son capaces de mover paquetes, contenedores, carros o palets, lo que está rentabilizando su actividad.
Así, los procesos son más estables y el personal tiene mayor disponibilidad para realizar operaciones de manufacturing, procesamiento o distribución, incluso en periodos de picos de trabajo. Otra ventaja de la incorporación de AMRs es que se gestionan en la nube, con la intención de que puedan mantener su operación en todo momento, aunque cambien las circunstancias relativas a mano de obra, plazos de entrega, volúmenes de pedidos, etc.
Por último, está la ventaja de la flexibilidad como uno de los principales valores de esta solución. La sencillez para reasignarles tareas o incorporar más unidades en planta de manera temporal son algunos de sus puntos fuertes. No obstante, si bien los AMR son versátiles, deben configurarse para que sean compatibles con una aplicación específica e integrarse a la perfección con flujos de trabajo en los que intervenga el ser humano.
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