El próximo Black Friday se celebrará el 29 de noviembre de 2024. Aunque aún quedan más de dos meses, debido a su impacto en el balance anual de las empresas, es importante empezar a prepararse y articular estrategias de marketing digital específicas.
Así, podrán disponer de margen de reacción ante imprevistos que puedan afectar a la consecución de ventas y beneficios. Según la agencia Súmate Marketing, ser previsores proporciona tiempo para una adecuada gestión de la logística y control de inventario, con el fin de prevenir las roturas de stock y evitar la insatisfacción de los clientes. También es importante analizar las estrategias de la competencia, coordinar al equipo para distribuir bien las tareas y realizar pruebas en las plataformas de marketing digital y en la web para identificar y corregir fallos a tiempo.
En este sentido, el verano es una época adecuada para realizar pruebas técnicas que aseguren que el sitio web pueda soportar un aumento significativo del tráfico y llevar a cabo acciones que mejoren la velocidad de carga, lo cual contribuirá a un mejor posicionamiento.
También es un momento oportuno para atraer tráfico mediante el diseño de ‘landing pages‘ con contenido específico para el Black Friday o la generación de contenidos con palabras clave relacionadas con este periodo, así como con las tendencias e intenciones de búsqueda identificadas por los expertos.
Por otro lado, a medida que se acerca la fecha, es fundamental lanzar campañas en redes sociales y correo electrónico hacia el final del verano que generen expectativas, aumenten el interés y mantengan la marca en la mente del consumidor. Los sorteos vinculados a regalos en esas fechas también resultan muy efectivos.
Por otro lado, es el momento de reconectar con quienes han mostrado interés en los productos en los meses previos, enviando ofertas personalizadas a aquellos que han dejado carritos abandonados. Igualmente, una estrategia eficaz para fidelizar a clientes que han confiado en el negocio anteriormente es enviarles promociones anticipadas y exclusivas del Black Friday.
En cualquier caso, cabe apuntar que existen sectores donde el Black Friday tiene un difícil encaje, como el mundo del lujo, o empresas para las que puede resultar gravoso instaurar promociones agresivas.