Prologis Europa ha publicado un nuevo estudio sobre el impacto que tienen las conversiones minoristas a espacios logísticos vinculados a la última milla, que teniendo en cuenta los múltiples obstáculos económicos, políticos, físicos y legales a la transformación, tendrán un impacto limitado en la oferta y demanda logística.
El efecto más pronunciado se producirá en la reconversión de centros comerciales, especialmente en aquellos de menor categoría que tienen un papel secundario en sus zonas de influencia y han sufrido más el auge del comercio electrónico.
Las oportunidades de conversión variarán mucho dependiendo del formato de comercio minorista, las dimensiones de los edificios y el mercado. En Estados Unidos, las conversiones representarán un total de 7.100.000 m² de nuevos espacios durante la próxima década o 740.000 m² anuales.
Teniendo en cuenta que el mercado de Prologis en el país ascenderá a 900.000.000 m² en 2030, las conversiones de espacios minoristas a logísticas representarían menos del 1%. Esto se explica, fundamentalmente, por los retos económicos, políticos, físicos y legales que suponen este tipo de adaptaciones.
En resumen, las tasas de conversión de retail a logística serán bajas en el futuro en EEUU y los plazos serán largos. No obstante, es probable que las tendencias identificadas lleguen a Europa con diferentes niveles de intensidad en función de las características del sector retail de cada país y su visibilidad para usos alternativos como la logística.
En este sentido, Europa cuenta con un mayor número de calles comerciales en los centros históricos de las ciudades y menos retailers con presencia en varias regiones que atraviesan problemas, como las cadenas JC Penny o Sears.
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