El último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) entrega mejores perspectivas para la economía mundial. Y claro, los últimos años han sido complicados producto de la pandemia y la inflación hecho que por lo demás ha afectado de forma importante a la logística y el comercio internacional, según nos comentaron desde Nowports.
Según las cifras del FMI la inflación mundial descenderá en 2023 y 2024 en medio de un crecimiento económico deslucido. De esa forma, se proyecta que el crecimiento mundial registre un descenso estimado en 2,9% en 2023, para luego repuntar a 3,1% en 2024. El pronóstico para 2023 es 0,2 puntos porcentuales más alto que el vaticinado en la edición de Perspectivas de la economía mundial (informe WEO) de octubre de 2022, pero inferior a la media histórica (2000–19) de 3,8%.
Lo cierto es que el alza de las tasas de interés de los bancos centrales para combatir la inflación y la guerra de Rusia en Ucrania continúan afectando la actividad económica mundial según nos comentaron desde Nowports. De hecho la cadena de suministro aun no llega a nivel de normalidad “prepandémico”, agregan los expertos del primer freight forwarder digital de Latinoamérica.
Según el informe del FMI, la rápida propagación del COVID-19 en China frenó el crecimiento en 2022, pero el arribo de una cierta normalidad en el gigante asiático abre el camino para una recuperación más veloz de lo anticipado.
En ese sentido, se prevé que la inflación mundial disminuya de 8,8% en 2022 a 6,6% en 2023 y a 4,3% en 2024, niveles aún superiores a los observados antes de la pandemia (2017–19) de alrededor del 3,5%.
Riesgos
La balanza de riesgos continúa inclinada a la baja, pero las amenazas se han moderado desde la publicación del último informe del FMI en octubre de 2022.
Entre los riesgos al alza, es plausibles un impulso más fuerte de la demanda reprimida en numerosas economías o una caída más veloz de la inflación. Entre los riesgos a la baja, destaca una evolución sanitaria severa en China que podría frenar la recuperación.
Lamentablemente la guerra de Rusia en Ucrania podría intensificarse y endurecer las condiciones mundiales de financiamiento, hecho que podría agudizar las tensiones por sobreendeudamiento.
El informe del FMI señala que la mayoría de las economías, ante la crisis del costo de vida, siguen manteniendo como prioridad conseguir una desinflación sostenida. Con condiciones monetarias más restrictivas y un menor ritmo de crecimiento que podrían incidir en la estabilidad financiera y de la deuda, resulta necesario recurrir a herramientas macroprudenciales y afianzar los marcos para la reestructuración de la deuda, señalan en el informe.
