Todas las crisis suelen ser momentos para replantear lo que hasta hace poco tiempo parecía un dogma infalible y que con el cambio de situación queda en tinta que se deshace en un papel mojado. Por lo que respecta a la gestión logística, los expertos estiman que la actual crisis sanitaria servirá, más que para introducir grandes cambios de calado, para impulsar tendencias que hasta hace unos meses parecían incipientes, e incluso residuales.
Entre ellas se encontraría la digitalización o la reordenación de las cadenas logísticas internacionales, merced a un nuevo impulso de dispersión de los puntos de producción. De igual modo, a juicio de profesionales del sector, la grave situación que vive la industria automovilística también ha dejado tocado a su modelo logístico, el flujo tenso o ‘just in time’, que hasta ahora había servido a la perfección para garantizar suministros y recortar costes en un mercado global.
Quitar tensión a la cadena logística
Sin embargo, las características de este nuevo tiempo que se ha abierto con la pandemia parecen más proclives a quitar tensión a la cadena logística, lo que a su vez podría traducirse en aumentos en los balances de existencias, a la vista de la incertidumbre que introduce en el suministro de mercancías la posibilidad de que puede producirse un rebrote de la enfermedad en cualquier momento y prácticamente en cualquier zona del mundo.
Por otro lado, los volúmenes crecientes del comercio electrónico presionan en sentido contrario, ya que colocar stocks en áreas densamente pobladas es caro, por lo que parece evidente que en el segmento de última milla y distribución urbana se mantendrá la alta rotación de mercancías, al menos hasta que se hayan desarrollado plenamente alguno de los conceptos de hub urbano con los que se lleva experimentando desde hace al menos tres años.
En consecuencia, el flujo tenso se seguirá aplicando en algunos segmentos de actividad, mientras que en otros se sustituirá por nuevos modelos logísticos destinados a garantizar que hay existencias.
Robotización en los nuevos centros logísticos
Cada vez son más las compañías que están optando por incorporar en sus centros de abastecimiento modelos y sistemas de robotización para hacer más eficientes sus cadenas de distribución. Por ejemplo, ID Logistics llegó recientemente a un acuerdo con la compañía Locus Robotics para implementar dichos modelos en sus planta de Toledo.
A partir de ahora, el centro logístico contará con 90 robots, cuyo objetivo principal será el de encargarse de automatizar acciones como la preparación, ubicación, carga y descarga de pedidos, así como la reposición de inventarios. «Controlar el proceso de picking, maximizar la eficiencia y la productividad, así como optimizar el flujo de trabajo y las rutas por las que navegan los robots», dijo Vincent Duranton, director de R&D ID Logistics Iberia.
La integración de estos robots ayudarán a reducir el esfuerzo físico de los empleados, aumentar su eficiencia y facilitar sus labores, permitiéndoles desarrollar su actividad en otras áreas menos mecánicas.