En 2022, las importaciones de combustibles llegaron a $7,646.6 millones de dólares, un 70% más comparado con el 2021.
En el informe estadístico de Petroecuador, se observa el incremento en los precios, sin embargo, no se compadece con la compra en volúmenes que sólo creció en 6.82%.
Para el 2021, se importaron 56,905 barriles de combustibles y para 2022 fueron 60,787 barriles.
De los combustibles que más impactaron en la importación se encuentra el diésel, por el incremento de sus precios debido a los problemas globales con la guerra entre Rusia y Ucrania, y el incremento en los consumos en el consumo interno. El pago por el diésel premium creció en 115% quedando en $3,083.1 millones.
El precio del barril subió de manera asombrosa. En el 2021, se pagaban $85.86 y para 2022 se terminó pagando $153.23 por barril.
Oswaldo Erazo, secretario ejecutivo de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo, recuerda que Ecuador es un país deficitario en producción de derivados, es por eso que debe importar el 65% del diesel que se consume, 63% de gasolina y el 84% de gas licuado de petróleo.
Además, el incremento del consumo interno de combustibles del sector eléctrico llegó a 84%, este representa siempre un doble subsidio.
Finalmente, la guerra en Ucrania que genera un aumento de precio de combustibles en un grado mayor que el de petróleo y a esto se suma el estiaje potente del consumo de diésel que se ha disparado.
