La caída de los bancos americanos, Silicon Valley Bank y el Signature Bank, comienza a generar controversia en el sector financiero mundial. Se mantiene en guardia el panorama económico, observando algún tipo de cambio en intereses, subida de precios y la inflación.
Anteriormente, la Reserva Federal (Fed) subía los intereses dependiendo los datos de inflación y empleo de EE.UU. Se cree que una inestabilidad financiera podría provocar un mayor análisis del ente regulado, con ello, un incremento.
Esta decisión podría fortalecer el dólar y generar un impacto en las economías mundiales que trabajen con esta moneda, como es Ecuador.
El exministro de Economía, Fausto Ortiz, considera que el impacto podría enfocarse en la moneda, encareciendo las exportaciones. “A nosotros, que tenemos la moneda norteamericana, nos interesa saber si (con esto) el dólar se va a fortalecer o se va a debilitar”.
Otros analistas creen que no se generarían cambios masivos debido a la situación financiera. Ya que la crisis actual, no se compara con la del 2008, que fue generada por un fraude en la venta de la cartera hipotecaria.
Santiago Mosquera, analista económico, cree que “es bastante localizada, y no necesariamente permeará al sistema financiero americano en su conjunto. Este problema es el típico caso de una corrida bancaria en la que los activos del banco pierden calidad y/o liquidez por razones específicas”.
Las organizaciones Reserva Federal, el Departamento del Tesoro y el organismo regulador, han acordado garantizar los depósitos de todos los clientes del californiano Silicon Valley Bank (SVB) y el neoyorquino Signature Bank. Además, se comprometieron a ofrecer al resto del sector una línea de préstamos que evite nuevas tensiones.